EL ESPÍRITU BUENO DE DIOS. Los evangelios dejan claro que Jesús vive y actúa movido por el Espíritu de Dios. Según la tradición bíblica el "Espíritu de Dios" es el aliento de Dios, que crea, envuelve y sostiene la vida entera; la fuerza que Dios tiene para renovar y transformar todo, y que busca siempre lo mejor para sus hijos. Jesús se siente enviado, no para condenar, destruir, amenazar, maldecir, sino para curar, construir, consolar y bendecir. Lleno de ese Espíritu bueno de Dios, se dedica a liberar a la gente de esos "malos espíritus" que no hacen más que daño a las personas. Así le recuerdan sus seguidores: "Ungido por Dios con el Espíritu Santo..., pasó la vida haciendo el bien y curando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él".
¿Qué "espíritu" nos anima hoy a los seguidores de Jesús? ¿Cuál es la motivación de todo lo que hacemos? Si el Espíritu de Jesús es el que nos anima, viviremos curando, construyendo, consolando a tantos oprimidos, deprimidos, reprimidos, y hasta suprimidos por el mal. Esto es lo que debería significar el bautismo para los cristianos.
1 comentario:
En otro pasaje del santo Evangelio dice: Este es mi hijo amado mi Predilecto, escuchaz le. Si meditaramos más los textos evangelicos, estoy seguro que nos iria mejor en esta vida.
Gracias por vuestros consejos.
Un saludo.
Eugenio.
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