Conmemoración de todos los Difuntos

La muerte nos iguala. La vida nos hace pensar que unos somos más que otros. Este día de todos los difuntos, nos une en el mismo dolor, porque todos tenemos seres queridos que han muerto. Los cristianos estamos unidos también en la misma fe y en la misma esperanza: la fe nos dice que los que han muerto viven y descansan junto a Dios. El cementerio no es el lugar donde están los que han muerto; es el lugar donde conservamos los restos que de ellos nos quedan. Ellos viven junto a Dios. Por eso nuestros cementerios están llenos de cruces, de flores y velas: la cruz nos recuerda a Jesús, que murió; las flores nos indican la alegría de la resurrección; las velas encendidas y los mensajes que están grabados en las lápidas, expresan nuestro deseo de seguir unidos a ellos.
En vida, hermano, en vida...

Si quieres hacer feliz a alguien que quieras mucho,

díselo hoy, sé bueno, en vida, hermano, en vida...

No esperes a que se muera, si deseas dar una flor,

mándalas hoy con amor, en vida hermano, en vida...

Si deseas decir "te quiero" a la gente de tu casa,

al amigo de cerca o de lejos, en vida, hermano, en vida...

No esperes a que se muera la gente para quererla

y hacerle sentir tu afecto, en vida, hermano, en vida...

Tú serás muy venturoso si aprende a hacer felices

a todos los que conozcas, en vida, hermano, en vida...

Nunca visites panteones ni llenes tumbas de flores,

llena de amor los corazónes, en vida, hermano, en vida...


1 comentario:

Anónimo dijo...

Así es, en vida hermanos, en vida...