Durante este año, la parroquia estamos colaborando en un proyecto de solidaridad con Zimbabwe, a través de un sacerdote de nuestra diócesis, Ildefonso Trujillo que está allí de misionero. Se han recaudado ya más de cinco mil euros en las colectas del primer fin de semana del mes, y a través de donativos que mucha gente nos hace llegar. Agradecemos la generosidad de todos.
Nos preocupan las noticias que nos llegan de Zimbabwe: La ONU denuncia que su presidente, durante las elecciones presidenciales, ha provocado un clima de fuerte violencia e inestabilidad, con actos de intimidación, detenciones arbitrarias, torturas y agresiones a la oposición política. El secretario general de ONU pide al gobierno de Mugabe que posponga la segunda vuelta en las elecciones porque: "...ha habido mucha violencia, demasiada intimidación. La celebración de una votación en estas condiciones, no tendría ninguna legitimidad".
Seis millones de hambrientos.
Mientras la crisis de los últimos años sigue aplastando a los ciudadanos, Mugabe sigue en su sillón, con 84 años. El país afronta una bancarrota, con una inflación que supera el 1000% y con una hambruna que deja sin pan a más de seis millones de personas, según datos de Amnistía Internacional.
Esta situación es el resultado de una desastrosa gestión del gobierno y de una gran sequía. En el año 2000 puso en marcha su Plan de Reforma de la Tierra, que puso en la calle a miles de granjeros europeos con la excusa de entregar sus tierras a campesinos negros sin propiedades. Pero los terrenos quedaron en manos de sus fieles.
Zimbabwe es una república, cuya capital es Harare, su presidente Robert Mugabe, tiene 84 años; tiene una población de 12.671.860 habitantes, según censo de 2004. Se habla oficialmente el inglés, pero también las lenguas nativas el Shona y el Sindebele. La mayoría de sus habitantes practica el cristianismo mezclado con creencias indígenas.
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