La falta de seguridad y salud en el trabajo es enorme en nuestra sociedad. Aunque hemos avanzado en capacidad técnica, sin embargo, el peligro que hoy lleva consigo trabajar es muy grande.
La Organización Internacional del Trabajo dice que cada año se producen en el mundo:
250 millones de accidentes laborales.
685.000 accidentes diarios.
475 por minuto.
Cada año mueren por accidente y enfermedades laborales: 1.100.000 personas. 3000 cada día.
La Organización Internacional del Trabajo dice que cada año se producen en el mundo:
250 millones de accidentes laborales.
685.000 accidentes diarios.
475 por minuto.
Cada año mueren por accidente y enfermedades laborales: 1.100.000 personas. 3000 cada día.
Y lo más grave de todo es que con aplicar las medidas de seguridad que ahora tenemos se podrían salvar cada año más de 600.000 vidas. ¿No es esto un crimen contra la humanidad? ¿No es una sangre que clama al cielo?
En España se producen diariamente más de 2.000 accidentes laborales. Cada día mueren en el trabajo 3 personas y otras 4 quedan discapacitadas. Los datos de los que disponemos demuestran que a peores condiciones de trabajo, más riesgo de accidente laboral.
En Extremadura en el año 2008 hubo: 16.578.
16.319 fueron leves
223 fueron graves y
9 fueron muy graves y
27 fueron mortales
En los meses de Enero y Febrero de 2009 ha habido: 1.867.
· 1.836 fueron leves
· 29 fueron graves
· 2 fueron mortales.
Es verdad que de unos años para acá, se han dado pasos positivos para dar respuesta al grave problema de la seguridad y de la salud en el trabajo. Hay que valorar también la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
En España se producen diariamente más de 2.000 accidentes laborales. Cada día mueren en el trabajo 3 personas y otras 4 quedan discapacitadas. Los datos de los que disponemos demuestran que a peores condiciones de trabajo, más riesgo de accidente laboral.
En Extremadura en el año 2008 hubo: 16.578.
16.319 fueron leves
223 fueron graves y
9 fueron muy graves y
27 fueron mortales
En los meses de Enero y Febrero de 2009 ha habido: 1.867.
· 1.836 fueron leves
· 29 fueron graves
· 2 fueron mortales.
Es verdad que de unos años para acá, se han dado pasos positivos para dar respuesta al grave problema de la seguridad y de la salud en el trabajo. Hay que valorar también la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
Sin embargo, estos pasos están teniendo una eficacia muy limitada, por el escandaloso incumplimiento de la Ley,
* porque las Administraciones Públicas se lo permiten o, no vigilan suficientemente por su cumplimiento,
* porque muchos trabajadores y trabajadoras no usan los medios de los que disponen para prevenir esta situación,
* por las actuales condiciones en las que se está realizando el trabajo: movilidad laboral diaria, contratos muy eventuales, muchas horas de trabajo, subcontratas..., que están sólo en función de la mayor rentabilidad económica, no de la seguridad y de la salud de los trabajadores...
Hoy, desgraciadamente, se concibe el trabajo fundamentalmente como una variable económica. Hay que producir lo más barato posible para poder competir en el mercado... De ahí que muchos empresarios no cumplan la ley y muchos trabajadores y trabajadoras prefieran la obtención de más dinero por su trabajo aunque trabajen menos seguros.
En la fe de la Iglesia podemos encontrar algunos elementos fundamentales que orientan e iluminan nuestra mirada, nuestra valoración y, sobre todo, nuestra actuación ante la situación de la salud laboral: EL TRABAJO ES PARA LA VIDA.
Hoy, desgraciadamente, se concibe el trabajo fundamentalmente como una variable económica. Hay que producir lo más barato posible para poder competir en el mercado... De ahí que muchos empresarios no cumplan la ley y muchos trabajadores y trabajadoras prefieran la obtención de más dinero por su trabajo aunque trabajen menos seguros.
En la fe de la Iglesia podemos encontrar algunos elementos fundamentales que orientan e iluminan nuestra mirada, nuestra valoración y, sobre todo, nuestra actuación ante la situación de la salud laboral: EL TRABAJO ES PARA LA VIDA.
Las personas somos hijos de Dios y, por eso, la vida de toda persona es un valor sagrado. Reconocer este valor sagrado de la vida implica comprometerse en la defensa y en la promoción de la vida de la persona en todas las dimensiones de la vida social, también en el trabajo.
El trabajo es un bien de la persona porque es un instrumento fundamental para su realización como persona y para la construcción de la sociedad. Sin embargo con mucha frecuencia el trabajo se ha convertido en un elemento de explotación, de sufrimiento y de muerte para el ser humano.
La dignidad del trabajo está en el hecho de que es una persona quien lo realiza y, por tanto, el respeto a la dignidad de la persona que trabaja ha de ser el primer criterio para organizar el trabajo y toda la vida económica.
Para Jesús que la persona viva es lo más importante. Por eso, ante la situación de los accidentes de trabajo y de las enfermedades laborales queremos proclamar que la gloria de Dios es que las personas vivan y que el trabajo es para la vida. Para un cristiano es urgente luchar activamente por un trabajo sin víctimas.
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